En una noche emocionante en el MetLife Stadium de Nueva Jersey, Palmeiras logró una victoria crucial sobre el Al Ahly de Egipto, con un marcador de 2-0. Este encuentro, correspondiente a la segunda jornada del Grupo A del Mundial de Clubes, también cuenta con la participación de equipos como Porto e Inter Miami, lo que añade aún más tensión a la competencia. El árbitro inglés Anthony Taylor estuvo al mando del partido, enfrentándose a diversas controversias y, para colmo, se vio obligado a suspender el encuentro brevemente debido a una tormenta eléctrica.
### Un paso hacia la clasificación
Con esta victoria, Palmeiras se posiciona en una situación privilegiada para avanzar a los octavos de final. Sin embargo, no todo está en sus manos, ya que aún dependen de los resultados de otros equipos, especialmente del siguiente partido entre Inter Miami y Porto. El equipo brasileño llegó a este encuentro tras un empate sin goles ante Porto, en el que mostró un rendimiento superior, mientras que Al Ahly había igualado en su debut 0-0 contra Inter Miami, un partido que dejó muchas expectativas.
### Intensidad desde el inicio
Desde el pitido inicial, ambos equipos mostraron una actitud ofensiva, creando un ida y vuelta constante. Apenas a los 6 minutos, Al Ahly ya había avisado con un remate desviado de Wessam Abou Ali, lo que puso a Palmeiras en alerta. El equipo egipcio, que había demostrado un juego intenso en su encuentro anterior, presionó en distintos sectores del campo, dificultando el desarrollo del juego del conjunto brasileño.
Sin embargo, la oportunidad más clara del primer tiempo llegó para Palmeiras. Estêvão, a los 17 minutos, realizó un desborde por la derecha, cerrándose hacia el centro y disparando junto al palo izquierdo de Mohamed El Shenawy. Aunque Palmeiras fue más dinámico en su juego, no logró mantener el control total del partido, mientras que Al Ahly enfrentaba dificultades para conectar pases y avanzar en el terreno.
### Polémicas y decisiones arbitrales
El primer tiempo estuvo marcado por un roce creciente entre los dos equipos. En este contexto, Al Ahly comenzó a mostrar más ambición, y Weverton, el arquero brasileño, tuvo que emplearse a fondo para detener un centro peligroso de Zizo. La situación más polémica del primer tiempo fue una dura entrada de Raphael Veiga, que inicialmente fue sancionada con tarjeta roja por el árbitro. Sin embargo, tras revisión del VAR, se determinó que la falta no había sido tan grave, y se cambió la decisión a una tarjeta amarilla.
### Un segundo tiempo que cambia el rumbo
El comienzo del segundo tiempo trajo un giro inesperado para Palmeiras. Lo que no pudieron conseguir en la primera mitad, lo encontraron en un tiro de esquina. En un intento de despeje, Wessam Abou Ali terminó por marcar un autogol, superando a su propio arquero. Este primer golpe desorientó al equipo egipcio, y pocos minutos después, Palmeiras aprovechó la situación. En un contragolpe preciso, el delantero argentino José López quedó mano a mano con El Shenawy y definió con calidad, colocando el 2-0 en el marcador.
### Interrupciones por clima y cambios tácticos
No obstante, el partido no estuvo exento de interrupciones. Anthony Taylor decidió suspender el encuentro debido a la tormenta eléctrica, marcando esta situación como la tercera vez en el Mundial de Clubes que se para un partido por condiciones climáticas. Después de una espera de más de 45 minutos, el encuentro se reanudó, encontrando a Palmeiras concentrado en mantener su ventaja.
En cuanto a la alineación, el técnico Abel Ferreira realizó algunos ajustes, destacando el regreso de Agustín Giay a su posición habitual de lateral derecho. Estevão, el joven talento brasileño, fue sustituido a quince minutos del final, dejando una impresión mixta tras su actuación. A pesar de haberse mostrado activo, aún se espera mucho más del prometedor jugador, que pronto se unirá al Chelsea.
### Un cierre tenso
Al final del partido, Al Ahly intentó reaccionar y buscar un descuento que lo mantuviera en la lucha, pero la defensa de Palmeiras se mostró sólida. La última imagen del encuentro fue la tarjeta amarilla que recibió Richar Ríos, un volante colombiano, por lanzar la pelota hacia la tribuna donde estaban los hinchas egipcios, un gesto que refleja la tensión y la pasión que se vivió en la cancha.
Con esta victoria, Palmeiras no solo se acerca a la clasificación, sino que también deja claro su potencial en este Mundial de Clubes, un torneo que sigue brindando sorpresas y emociones. La expectativa ahora se centra en el próximo partido, donde se definirá el futuro de varios equipos, incluido el destino del club brasileño.